15 junio 2007

"La otra"

En el transcurso de la última sesión de control al Gobierno, la Vicepresidenta Fernández de la Vega no pudo evitar meter una “cuña”, casi con calzador, a cuenta de un comentario “off the record” que hizo Mariano Rajoy, durante una pausa publicitaria, en una entrevista radiofónica, y que, finalmente, fue difundido por otros medios, generando la controversia comprensible derivada del incumplimiento de las normas éticas periodísticas.

Hablaba Rajoy de su reunión con Zapatero en La Moncloa y de la posterior comparecencia de Fdez. de la Vega, y se refería al Presidente como “él” y a la Vicepresidenta como “la otra”. Ante esto, que, difícilmente, se puede percibir como ofensivo, la Sra. Vicepresidenta se mostró profundamente irritada. Durante su intervención, acusó a Rajoy de misógino recalcitrante y le dijo que debería de tener “un poco más de respeto democrático” y “de educación institucional”.

La Vicepresidenta mostró, así, su particular forma de entender la Lengua Española, pues, según la primera acepción del Diccionario de la RAE, “otra” es un “adjetivo que se dice de una persona o de una cosa distinta de aquella de la que se habla”. Es claramente éste el sentido que tiene la palabra en el “off the record” de Rajoy, por lo que no se entienden, ni su enfado, ni sus reproches a Rajoy, salvo que se interpreten en clave teatral. Algo de eso debe haber, para que nos vamos a engañar.

Llamativa es, también, la forma en que se expresa, empeñándose en “soldar” a cada sustantivo un adjetivo calificativo, case o no case, da igual. Ejemplos de ello son el “respeto democrático” y la “educación institucional” que exige a Rajoy. Ahí es nada. Fíjense, hasta se pueden intercambiar los adjetivos sin que apenas se modifique el significado de lo que dice, esto es, nada.

En lo que respecta al contenido de su mensaje, es particularmente esclarecedora la frase “la otra es –nada menos que, añado- la Vicepresidenta del Gobierno de España” que pronuncia al inicio de su alocución. Donde se entiende que, si “la otra” fuese alguna “otra” cualquiera, pues vale; pero que es inadmisible que se denomine “la otra” a la Vicepresidenta del Gobierno. De lo que se desprende una idea de que todos “somos iguales”, pero ellos (el Gobierno) mejores que los demás, lo que denota sus aires de grandeza y su sentimiento elitista.



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Enviado a las 15/06/2007 21:13:55 por zzzz
Coincido plenamente con tu comentario: teatro y arrogancia. Y mira que en privado Rajoy podría ponerla a caldo o incluso usar términos peyorativos, y el tío es educado en todo momento. Pero ya se sabe: difama que algo queda.

Claudedeu dijo...

Que Rajoy diga "ETA es una gran nación" debería haber sido aplaudido por Zapatero y la otra. Con el lapsus de Rajoy podía haber puesto a caldo a ZP. Y a la otra, claro.

Anónimo dijo...

Enviado a las 16/06/2007 00:29:54 por
A veces,cuando delante no tienes una dama,sino algo distinto,las ganas son de llamar a cada persona por lo que es o por lo que aparenta,pero la prudencia es algo que no se aprenderá en la asignatura de partido. Eso se aprende en casa...